Simón José Antonio de la Santísima
Trinidad Bolívar y Palacio, nació en Caracas el 24 de junio de 1783, hijo de
una familia criolla muy prestigiosa en Venezuela, fue educado como un verdadero
heredero de la madre patria. Su maestro, el insigne prohombre, formador de
formadores, Don Simón Rodríguez, contribuyó en la educación básica durante sus
primeros años, incluso hasta su juventud, cuando la aristócrata familia decidió
enviarlo a Europa para continuar con su educación. Una vez en el viejo
continente, el joven Bolívar conoció ese "desacierto" de la carta
original de los derechos humanos, además de leer a los grandes pensadores de la
revolución francesa y esa tendencia de "dizque igualdad" entre los
seres humanos, a pesar de que el niño Simoncito fue criado por esclavos traídos
a mansalva desde África.
Para el año 1810, a los 27 años, después
de volver a las américas y tras haber recibido su formación, juró que no
descansaría hasta ver su patria libre del yugo español (1). Para lograr su
objetivo promovió varios intentos golpistas en contra de las tropas realistas.
Derrotado, emigró a Cartagena de Indias, donde en 1811 se había elevado el
grito de independencia, con posterioridad, apaciguado por el
"pacificador" Pablo Morillo. Después de varias derrotas, finalmente
llegaron las victorias en el Pantano de Vargas y El Puente de Boyacá en 1819,
donde se dio la libertad a lo que hoy conocemos como la hermosa Colombia,
regresó a Venezuela y en la batalla de Carabobo liberó su país, luego libertó
Ecuador, Perú y Bolivia. Como se puede ver, Simón Bolívar fue un hombre insigne
a pesar de su cuna aristocrática. Finalmente murió en Santa Marta el 17 de
diciembre de 1830 (fecha en la que nacen y mueren los grandes hombres de la
patria colombiana).
Por el otro lado, estaba Francisco José de
Paula Santander y Omaña, quien nació en la ciudad de Villa del Rosario en
Cúcuta el 2 de abril de 1792, otro "criollo" (2), educado en los
mejores colegios de la Nueva Granada (3), entre ellos el San Bartolomé (Colegio
que aún existe en nuestros días). Doctor en leyes a los 17 años, se unió a la
revolución en contra de la dominación española, fue nombrado como General por
decisión del mismo Bolívar, combatió en las batallas que liberaron a Colombia,
pero, según leo, no acompañó la liberación de los otros 4 países donde fue
victorioso el joven Simoncito. Santander es reconocido en la historia patria
como el "hombre de las leyes", fue vicepresidente de la "Gran
Colombia" hasta que conspiró contra Bolívar y fue desterrado a Europa sin
olvidar los años que paso en las mazmorras de Cartagena. Presidente de Colombia
hasta 1837. Fue un hombre insigne a pesar de la rigidez de sus normas y de
intentar formar un país de leyes. Murió en 1840.
En 1810, después del 20 de julio, cuando
se dio el grito de independencia, y en Venezuela después del 5 de Julio de
1811, se inició una discusión interna entre los aristócratas criollos que
intentaron asumir el poder, la discusión principal rondaba alrededor de si se
formaba una república o se creaba un nuevo estado monárquico, a esta etapa de
la historia se le conoce como la "Patria Boba". A partir de la
bobería no solo de Colombia, sino de la mayoría de países latinoamericanos
recién independizados, se originaron un sin número de guerras internas donde
nuestros ancestros se mataban de manera inmisericorde, pensado en que cada uno
tenía la razón sobre la posición de los demás. No sé en Venezuela, pero
Colombia se desangró durante casi dos siglos por cuenta de la guerra entre
"santanderistas y bolivaristas" (hoy liberales y
conservadores).
Tras varias décadas de guerras y miles de
muertos (siempre los más pobres), se logró la tan anhelada LIBERTAD. Esta
libertad tuvo como agravante que los líderes siempre gobernaron en favor de sus
beneficios personales antes que los derechos colectivos (incluso Santander y
Bolívar), dando origen al orgullo patrio de la corrupción, la cual no es solo
colombiana sino de todos los países latinos. Esta corrupción pretendió ser
combatida por cuenta de los manifiestos de Carlos Marx y Federico Engels, un
par de alemanes desocupados que formularon las normas básicas del comunismo;
pretendiendo liberar a los más pobres de su pauperrimidad, solo que las
propuestas de estos se basaban en que la lumpem debería ser la carne de cañón
para esta lucha antes que el cambio interno de los individuos.
Este soslayado recorrido histórico conduce
a la lucha de clases, donde unos postulados del siglo diecinueve pretenden
combatir la desigualdad social generada por la naciente burguesía capitalista.
En las últimas tres décadas se han venido produciendo líderes cada vez más
convencidos de los postulados marxistas, incluso generando la más antigua
guerra de guerrillas del mundo. Sin embargo la "democracia" ha
demostrado que sin las armas también se puede gobernar con una visión de
equidad. Nada más que no existe sistema perfecto y cuando prima la corrupción
del individuo tratando de imponer su régimen se pierde por completo el sentido
de las libertades.
Durante muchos años, bastantes jóvenes
pensaron que la igualdad de las personas podría llegar algún día, pero esta no
fue posible al olvidar el sentido social y pasar a primar la avaricia del poder
y del dinero, es decir, que los comunistas se volvieron capitalistas (sino
miren lo que es China hoy, una potencia económica que explota y esclaviza a su
pueblo). La deformación del comunismo y el socialismo ha llegado a tal punto
que sus líderes se han convertido en mesiánicos gobernantes, que utilizan las
mismas estrategias de los capitalistas salvajes para mantener su "statu
quo"; claro, no es justo condenar solo a las alternativas de Gobierno,
se debe decir que esta situación no sería tal de no ser por las derechas y
extremas derechas que han abusado de las riquezas de todos los países
latinoamericanos por más de dos siglos y peor aún han masacrado a muchas
personas.
Hoy con dolor de patria tengo que decir
que me siento completamente decepcionado de algunos postulados que en mi
juventud consideré como una real alternativa. Recuerdo como los sindicatos
acabaron con cientos de empresas y con miles de empleos, sin medir las
consecuencias de sus luchas, algunas justas. Hoy veo como el sueño de 300.000
bogotanos no dio el resultado que se esperaba a pesar de los avances sociales y
de equidad.
Siempre pensé que los militares nunca
serían de izquierda, por lo menos de eso me convencieron la cercanía con la
antigua República Democrática Alemana y los Sindicatos, pero el Coronel Hugo
Rafael Chávez Frías cambió mi paradigma; y postuló lo que hoy se promulga como
el "Socialismo del siglo XXI", este nuevo líder militar se convirtió
en el libertador de Venezuela al acabar con las mafias oligárquicas que
carcomieron ese país hasta 1999 cuando el coronel ascendió al poder. Sus
primeros seis años mostraban una mejora en las condiciones de su pueblo, luego
se le ocurrió que él era el único capaz de mantener ese nuevo estado de derecho
y desde ahí todo empezó a decaer, hasta que se le ocurrió morirse y dejar como
reemplazo a su dictadorcito de pacotilla.
Digamos que la crisis económica en
Venezuela no es tan grave como pretenden mostrarla los "mafío-medios"
de comunicación fuera de ese país, pero sí hay problemas de abastecimiento que
algún día deberán generar un conflicto interno de proporciones mayores (Dios no
lo quiera). Pero hay algo que se evidencia y por lo cual el gobierno venezolano
está tambaleando, y es que el convencimiento de sus gentes se está diezmando
como consecuencia de no encontrar la forma de avanzar, ¿hacia dónde?, no sé,
pero la migración de tanto venezolano a Colombia y Miami debería ser nuestro
indicador de que algo no está bien.
Sin embargo, la situación actual entre
Colombia y Venezuela me lleva a pensar que ese "socialismo",
propuesto desde varios países latinoamericanos, no es más que un sofisma de la
más alta alcurnia, ya que los postulados reales están siendo diezmados por la
avaricia de poder, y obvio de riqueza, pisoteando los derechos de muchas
personas a quienes también se les diezmaron sus derechos en Colombia, y
que ahora son doblemente desplazados.
Nicolás Maduro Moros, de quien se sospecha
sea colombiano, resultó ser peor que cualquier ultraderechista, no solo utiliza
la pobreza de tanto colombiano que no logró encontrar oportunidad en este
país y que tuvo que migrar para buscar una mejor vida, sino que los utiliza
como estrategia politiquera. Lo peor es tanto veneco y colombiano sin mente que
se atreven a defenderlo, reafirman que los colombianos deportados son todos
"paracos". Para la muestra, un botón; el peligroso paramilitar que se
observa en la fotografía, es un "paraquito" enviado por el pueblo colombiano para derrocar al gobierno, huye
de Venezuela para proteger su vida y en sus manos carga el armamento con el que
planea derrocar al mediocre, inepto e incompetente presidente de Venezuela.
Mi conclusión después de todo esto es que,
definitivamente, generar luchas sociales por cuenta de tendencias económicas no
tiene sentido si no se logra cambiar al individuo antes que al colectivo.
Lamentablemente no creo que un verdadero cambio social de equidad e igualdad se
dé en los próximos 200 años, y más si las premisas son de izquierda o derecha,
de liberales o conservadores, de bolivaristas o santanderistas, de socialistas
o capitalista, mientras la polarización se mantenga seguiremos en la misma
mierda, sea quien sea al que elijamos como gobernante.
1. Información general de Simón Bolívar
recuperado de;
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/b/bolivar.htm,
el 28 de Agosto de 2015
2. Término utilizado para definir a los
descendientes de españoles venidos a menos por no haber podido regresar nunca a
España.
3. Información general de Francisco de
Paula Santander de:
http://www.colombia-sa.com/presidentes/francisco_de_paula_santander.html,
28 de Agosto de 2015.
4. La fotografía elegida no es de mi autoría, pero si alguno de los lectores de este Blog identifica al autor le agradezco indicarme quien es para poder dar los créditos respectivos.




